Su primera aproximación  al pedido por la despenalización del aborto fue en 1990  en el Encuentro Feminista de San Bernardo cuando una compañera  pasó a pedir firmas y ella espantada se negó hasta que hacia el final del tercer día la buscó para poner su rúbrica en el documento al entender que las mujeres éramos autónomas y el aborto debía ser un derecho.

Con 74 años, esta bruja de pañuelo verde al cuello y muchas batallas peleadas, surfea la ola verde y violeta llena de una de juventud revoltosa con ganas de cambiar el mundo y nos marca el camino a las que venimos atrás.

Ella es Nina Brugo, activista feminista, militante y abogada de organismos de Derechos Humanos, e integrante de la Campaña por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito.

Esta egresada de la UCA que comenzó su militancia en la década del ’60 en movimientos religiosos y sociales de Los Polvorines, Grand Bourg y José C. Paz y que llegó al feminismo durante su exilio en México, se vuelve la bastonera en cada marcha, marcando el ritmo a las pibas con pelucas, pañuelos, labios pintados, bañadas en gibré, en tetas, vestidas, en rondas, bailando y gritando por el aborto legal, nutriéndose de su energía para seguir dando la pelea como hace 60 años con la certeza que ahora que sí nos ven, ¡el patriarcado se va a caer!

Foto: Sebastián Freire